
A modo de proteger vuestro patrimonio de posibles contingencias, cuando estamos en frente de un cliente, con frecuencia tenemos que explicarles los diferentes tipos de incapacidad laboral que existen. Por ello, en este post, daremos a conocer cuáles son los diferentes tipos de incapacidades establecidas por la ley.
A modo de proteger vuestro patrimonio de posibles contingencias, cuando estamos en frente de un cliente, con frecuencia tenemos que explicarles los diferentes tipos de incapacidad laboral que existen. Por ello, en este post, daremos a conocer cuáles son los diferentes tipos de incapacidades establecidas por la ley.
Cuando se habla de una incapacidad, se hace referencia a la situación que se da cuando un trabajador ya no es capaz de desempeñar las funciones que habitualmente realizaba en su puesto de trabajo. Dicho término está más relacionado con la medida que impide a la persona seguir realizando un determinado trabajo, que con la gravedad de la enfermedad que la ha provocado.
Según el alcance de esta incapacidad, existen dos tipos de incapacidad laboral que son: incapacidad temporal o incapacidad permanente.
Incapacidad laboral temporal (IT)
La incapacidad temporal también conocida como incapacidad transitoria o baja médica, es la situación en la que se encuentra una persona que está imposibilitada para el trabajo de forma puntual y requiere de asistencia médica. Esto debido a una enfermedad o un accidente laboral o de tráfico. También, comprende los periodos de observación por enfermedad profesional.
Por lo general, la duración máxima de esta incapacidad es de 12 meses, aunque puede ser prorrogable por otros 6 meses más. Momento en el cual el Instituto Nacional de la Seguridad Social valorará la posibilidad de que la incapacidad se convierta en permanente, o bien que se presuma el alta médica.
En el caso específico de periodos de observación de enfermedad profesional, la duración máxima es de 6 meses, que también puede verse alargados por otros 6 meses más.
Durante estos periodos de tiempo, el contrato laboral que mantiene el trabajador con la empresa queda suspendido, adquiriendo este derecho a recibir asistencia sanitaria y el subsidio económico correspondiente, que puede llegar a ser del 60% o el 75% de la base reguladora en caso de contingencias profesionales.
En concreto, el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) indica que: “la prestación económica por incapacidad temporal trata de cubrir la falta de ingresos que se produce cuando el trabajador, debido a una enfermedad o accidente, está imposibilitado temporalmente para trabajar y precisa asistencia sanitaria de la Seguridad Social».
Incapacidad laboral permanente (IP)
Como ya se mencionó en el apartado anterior, luego de concluir el periodo máximo de la incapacidad temporal, siempre que la Seguridad Social lo considere necesario, se podrá pasar a la situación de incapacidad permanente.
Aclaro este punto, se puede definir a la incapacidad permanente como la situación de un trabajador que, tras haberse sometido a los tratamientos médicos de rigor, aún sigue presentando restricciones fisiológicas o funcionales graves que pueden llegar a ser definitivas y disminuyan o anulen por completo su capacidad laboral.
Según el INSS, la incapacidad permanente consiste específicamente en la «prestación económica que, en su modalidad contributiva, trata de cubrir la pérdida de rentas salariales o profesionales que sufre una persona, cuando estando afectada por un proceso patológico o traumático derivado de una enfermedad o accidente, ve reducida o anulada su capacidad laboral de forma presumiblemente definitiva».
Existen a su vez diferentes posibilidades de incapacidad permanente según el grado de reducción de la capacidad del trabajador, las cuales cabe mencionar que pueden ser reversibles o cambiar de grado, dependiendo de lo que se valore tras esta revisión.
Grados de la incapacidad permanente
Actualmente, existen un total de 4 grados de incapacidad permanente las cuales serán debidamente abordadas a continuación.
Incapacidad permanente parcial (IPP)
Se trata de una incapacidad que alcanza un grado de disminución en el rendimiento habitual de la profesión no inferior al 33%, pero sin llegar a impedir por completo las tareas fundamentales de dicha profesión y pudiendo, por tanto, continuar con la profesión normal. Tal prestación conlleva a que el afectado devengue un pago de 24 mensualidades abonadas de una única vez.
Requisitos para solicitar la incapacidad permanente parcial
- Poseer al menos un período de cotización, si la incapacidad proviene de una enfermedad común.
- No debe tener la edad indicada en la sección 1. a) del artículo 205 de la Ley General de la Seguridad Social (LGSS). Esto, al momento del hecho generador. O en su defecto, no poseer los requisitos para recibir la pensión de jubilación contributiva, si la incapacidad proviene de contingencias comunes.
- Debe encontrarse afiliado y estar en alta médica, o una situación asimilada a esta. La cual puede ser por: excedencia forzosa, desempleo, suscripción de convenio especial, maternidad, paternidad, entre otros.
Todos estos requisitos deben haberse cumplido para el momento del hecho generador. Lo que significa para cuando se origine el accidente de tráfico, laboral o la enfermedad que dé pie a la incapacidad.
Incapacidad permanente total (IPT)
En este caso, la incapacidad es tal, que no permite que el trabajador siga desempeñando su profesión como habitualmente lo venía realizando, más, sin embargo, si puede trabajar en otra profesión distinta.
De cumplir con todos los requisitos establecidos por la ley, el trabajador incapacitado cobrará una prestación de por vida (pudiendo además cobrar el sueldo proveniente de otro trabajo) del 55% de la base reguladora.
Requisitos para solicitar la incapacidad total
- Poseer un período de cotización, si la incapacidad proviene de una enfermedad común.
- No poseer la edad establecida en la sección 1. a) del artículo 205 de la LGSS al momento de la ocurrencia del hecho generador. O en su lugar, no debe tener los requisitos para poder optar a la pensión de jubilación contributiva del Sistema de Seguridad Social. Siempre y cuando, la incapacidad provenga de un accidente no laboral o enfermedad común.
- Estar afiliado y haber recibido el alta médica, o encontrarse en una situación asimilada a la misma, tales como: paternidad, maternidad, desempleo, entre otros.
Lo mencionado con anterioridad debe haberse cumplido para el momento del hecho causante de la incapacidad, es decir, el accidente de tráfico, laboral o enfermedad.
Incapacidad permanente absoluta (IPA)
Este grado de incapacidad imposibilita a la persona afectada para que pueda realizar cualquier tipo de profesión con un mínimo de profesionalidad y dedicación. La prestación consiste en una pensión vitalicia del 100% del salario bruto. Es importante aclarar que esta incapacidad no impide el desempeño de ciertas actividades compatibles con el estado de la persona incapacitada.
Requisitos para solicitar la incapacidad permanente absoluta
Este grado posee los mismos requisitos de la incapacidad permanente total.
Gran invalidez (GI)
Dentro de los grados de incapacidad permanente existe la posibilidad de que se añada un complemento a la pensión percibida por incapacidad. Este complemento se denomina gran invalidez, y se presenta cuando la persona incapacitada permanentemente requiere un tercero para sus tareas diarias, ya que no puede valerse por sí mismo.
Esto supondrá un aumento de la prestación percibida mediante una ayuda económica que supone un 45% del salario mínimo interprofesional.
Requisitos para solicitar la gran invalidez
Los requisitos de la incapacidad permanente total, también aplican para la gran invalidez.
¿Cómo puede una persona asegurarse frente a cada una de estas contingencias?
A continuación, daremos a conocer cuáles pólizas te pueden sorprender ante tales circunstancias:
Seguros de subsidio
Conocido también como seguro de baja, este seguro te permitirá recibir pagos de una compañía aseguradora para situaciones de baja laboral temporal. Esto complementará el porcentaje de tu nómina que te pagará la Seguridad Social.
Seguros de accidente
El único que permite cubrir cualquier tipo de incapacidad parcial reconocida es el seguro de accidentes para autónomos. Ningún seguro de vida cubre esta contingencia, salvo que de la incapacidad parcial pueda devenir una total o absoluta. Existen dos modalidades de contratación de seguros de accidentes que son la normal y la progresiva, esto con el objetivo de mejorar las indemnizaciones a percibir.
La gran invalidez no es muy común, y suele introducirse como una garantía optativa en algún seguro de accidentes.
Seguro de vida
Tanto la incapacidad total como la absoluta se pueden cubrir tanto por seguros de accidentes como de vida. La diferencia entre ambos es enorme, ya que mientras que el primero solo nos cubre esas contingencias si son ocasionadas por un accidente, el segundo, además, nos cubriría las que se generasen por una enfermedad.
Concluyendo, muchas son las circunstancias que pueden influir en el tipo de invalidez reconocida, así como en las distintas opciones que tenemos para cubrir esas contingencias mediante un seguro.
Si deseáis que te aclaremos tus dudas, y asegurarte de cobrar esa prestación en caso de que surja la necesidad, ante una incapacidad temporal o bien permanente, puedes contactar con nosotros.
Preguntas frecuentes:
La siguiente sección que veréis en seguida, contiene las preguntas que con mayor frecuencia suelen presentar las personas que han decidido contratar vuestros servicios. Si necesitáis ayuda jurídica, recuerda que podéis ponerte en contacto directo con nosotros por medio de esta página web.
¿Cuáles son las causas de una incapacidad?
Existen 3 causas básicas que son generadoras de una incapacidad. Estas son:
- Por enfermedad, ya sea común o profesional.
- Por accidente, que puede ser también de trabajo o no.
- Los periodos de observación para enfermedades profesionales que requieran baja médica.
¿Qué quiere decir tipo de incapacidad?
Por un lado, la incapacidad permanente parcial es la disminución de las facultades o aptitudes de una persona para trabajar. Mientras que la incapacidad permanente total es la pérdida de facultades o aptitudes de una persona que la imposibilita para desempeñar cualquier trabajo por el resto de su vida.
¿Qué objetivo tiene asignar un grado de incapacidad?
Este documento sirve como justificante para la ausencia en el trabajo durante los días que el empleado necesite para su recuperación. Las incapacidades laborales se dan por alguna enfermedad o accidente de trabajo.
¿Quién puede solicitar la incapacidad permanente?
El procedimiento de solicitud de una pensión por incapacidad permanente puede iniciarse por iniciativa del propio trabajador interesado. Pero, también de oficio por parte de la Seguridad Social, o a instancias de la mutua correspondiente.
¿Qué grado de discapacidad tiene una incapacidad permanente total?
Las personas que tengan reconocida una incapacidad permanente total presentan un grado de discapacidad igual o superior al 33%, lo que proporciona una serie de beneficios sociales y fiscales.